La aventura de las acuarelas (parte II: la venganza)

Foto de una mesa con una paleta de acuarelas y un montón de pruebas pequeñitas de muchos colores

La parte I está aquí, por si acaso. Pero la resumo: hace poco se estrenó mi nuevo cómic, Curso de Cocina para Ex Dioses, en la web de Fandogamia. Su único requisito para aprobar el proyecto fue que tuviera toques de color, y yo me empeñé en hacerlos con acuarelas. Y se acercaba la fecha de entrega y no había manera de conseguir un resultado que me gustara. Ahora sí, retomamos la narración. ¡Que entren mis pensamientos!

Vale, si escaneo sólo las acuarelas no las alineo con la tinta. Y si imprimo bloques de negro mi impresora sufre…

…voy a dibujar una página teniendo eso en cuenta.

Fragmento de la tinta de la primera página del cómic Curso de cocina para ex dioses, con la protagonista en trance



Hice la primera página del cómic poniendo masas de negro rotas con blanco, para que la impresora no fuera a brocha gorda. Esto me gustó inmediatamente, le da un rollo hecho a mano que me recuerda al cómic de Ocean que os mencioné en el post anterior, así que decidí que se quedaba.

Siguiente paso: imprimir la página todo lo grande que me permite mi impresora y ponerle acuarelas.

Foto de pruebas de impresión con detalles de acuarela pintadas por encima

Ya podéis ver en las fotos que el negro quedaba gris -tanto que se notaba por dónde había puesto acuarelas y por dónde no- pero aún cabía la posibilidad de arreglarlo con el escaneo.

…o eso creía yo, porque no importa cómo lo escaneaba no quedaba bien. No era un problema del escáner, era un problema de contraste: le estaba pidiendo blancos perfectos y negros perfectos, y además un tono intermedio con una textura, o sea que el pobre no sabía dónde meterse.

Llegado este punto valoré llamar a la gente de Fandogamia llorando para explicarles que el gris es el nuevo negro, pero de pronto recordé:

Tramas mecánicas.

O, más concretamente, cómo se ponían las tramas mecánicas en los mangas, antes del digital. Los dibujantes compraban hojas con la trama impresa, como estas, las recortaban para que tuvieran la forma apropiada para el dibujo, y las pegaban encima.

¿Puedo hacer lo mismo con texturas de acuarela?

Foto de un papel con varios recuadros de acuarela de distintos colores, sobre una mesa

Era lo que me quedaba por probar, así que hice varios bloques de color, combinando colores a brocha gorda (me hice un cuadro de combinaciones, que es el que veis al principio del post, para saber qué colores podía conseguir fácilmente). Para eso usé un papel con mucha textura, con el que nunca me había sentido cómoda para hacer tinta.

Luego lo escaneé y lo ‘recorté’ al tamaño de mis viñetas para colocarlo debajo de la tinta. Y el resultado (a la derecha) me gustó mucho más que las pruebas que había hecho hasta entonces, imprimiendo en distintos papeles:

Comparativa con la misma página de Curso de cocina para ex dioses en tres papeles distintos (la última es digital y el papel está solo en los detalles de acuarela)

Para empezar, porque ya no le estaba pidiendo a mi escáner lo imposible con gorrito: al pedirle sólo que me escaneara el color de las acuarelas, sin blanco ni negro, se conservaba la textura mucho mejor.

Detalle de la página impresa en comparación con la página digital, el color es más vibrante y con más textura en la digital

Y para seguir, porque como la acuarela tiene forma cuadrada y la recorto, no tengo que preocuparme de que queden irregularidades ni huecos blancos.

La ilustración acabada queda así de maja:

La viñeta con la que he estado haciendo pruebas todo el post, pero esta vez bonita y acabada

Y nadie nunca sabrá lo mal que lo pasé y las vueltas que di par-

Ups.

Espero que os haya gustado este repaso a todo el trabajo que hay antes de empezar a dibujar, y que os guste el cómic.  Si queréis leer más posts así, tengo una newsletter donde hablo de ilustración, hacer cómics y otras movidas creativas. ¡Es gratis y hay regalitos por apuntarse!