Existe una cosa que se llama Salir del camino, una antología de cuentos queer donde un montón de gente LGBT+ le da un girito a los cuentos populares. Para más emoción, se puso foco en localizarlos en España, y para más emoción aún Eva Duncan escribió en ella una historia sobre una señora que se enamora de una señora acuática.
Y me dejó ilustrarla.
Soy una mujer sencilla y cuando oigo ‘señora acuática’ le hacen así los ojitos. Así que lo primero que hice fue leer el relato, chillar y luego hacer el boceto en digital, para asegurarme de que la composición quedaba chula y a la señora se la veía bien.
Quería darle un estilo de ilustración de cuento clásico, tipo lo que hice para La Mala del Cuento, lo que quiere decir sacar a pasear las plumillas.
Una cosa que he aprendido a hacer es probar las plumillas en el papel que voy a usar antes de elegir una. Con este decidí hacer la mayor parte del dibujo con la Mapping pen… que tiene un trazo precioso pero es muy variable y que hay que atar corto. Será que no tengo instinto de conservación.
El dibujo en digital se imprime y se calca en azul suavísimo en el papel bueno (objetivo: no borrar. Odiamos borrar en esta casa).
Y luego se va entintando, empezando por los elementos que requieren más detalle (cara, manos…) y dejando secar antes de ir hacia los menos precisos (agua, hojas).
Con todas mis plumillas uso fundas de lápiz de tablet (en la foto en rosa) para engrosar un poco el mango. Ayuda a evitar calambres cuando llevas mucho rato apretando los dedos como si te fuera la vida en ello, y para lo que cunde es bastante barato.
Para el pelo hice el efecto negro raya a raya -dejadme- pero para los matorrales hice sólo los bordes y las masas de negro las rellené con el ordenador, para ahorrarme sufrimiento si volcaba un tintero o se me caía el pincel.
Y este es el resultado:
La antología está llena de ilustraciones chulísimas y relatos ídem, estoy muy contenta de haber podido participar. Si no la tenéis aún, la segunda edición pronto estará a la venta de la mano de la editorial Sugaar.
¡Espero que os haya gustado el vistazo entre bambalinas! Si es que sí os recomiendo muchísimo apuntaros a la newsletter y así os voy compartiendo proyectos, dibujos y detalles del proceso como este.