¡Hola buenas! Agosto ha sido un mes de contrastes: no he ido de vacaciones (eso es malo) pero he avanzado un montón con el cómic (eso es bueno) pero he estado enferma (eso es malo).
Mi plan era dejarlo todo enviado a imprenta este mes, que suelen estar menos ocupados. Por temas de salud no ha podido ser, así que los envíos -que estaban previstos para octubre- se retrasarán un poco. En cuanto pueda enviarlo a imprenta y me confirmen plazos ajusto el calendario y os digo, para que podáis organizaros o cambiar la dirección si fuera necesario.
Una vez hecho el aviso, la celebración: ¡he acabado el dibujo de todas las páginas! ¡El prólogo, la historia principal y el epílogo!
Lo he tenido que censurar porque spoilers, pero aquí una viñeta que me gusta mucho:
¡Y ahora tocan los grises! Hay muchas formas de hacer cómic, pero yo he descubierto que cuando estoy haciendo una historia larga mi dibujo cambia un poco entre la primera página y la última.
Así que lo que intento es hacer toda la línea de golpe: es más rápido y hay menos diferencias. Eso significa que cuando acabo tengo que volver a la primera página para hacer los grises y poner los textos, pero el resultado queda más coherente.
Como no uso color, los grises son la parte que hace que el cómic tenga más personalidad y sea más fácil de leer. Intento que en cada obra que hago sean un poco distintos y se adapten al tono. Aquí tenéis algunas de las pruebas que hice antes de decidirme por la del medio:
Y los pinceles que finalmente he seleccionado para trabajar, que si no limito mis opciones al final me bloqueo y no sé qué elegir. Son del set Rusty Nib de True grit texture supply:
Seguiré subiendo trocitos a Twitter y a mis stories de instagram. Y como siempre, foto de cómo estamos exactamente:
¡Abrazote, nos vemos con novedades en la siguiente!