El año pasado Paloma me contactó para que hiciera la portada de su libro de rol. Me pareció un proyecto curioso y ella tenía paciencia y margen para adaptarse a mi -escasa- disponibilidad, así que me puse manos a la obra.
El libro se llama Retazos de un camino: aventuras de una jugadora de rol y puede encontrarse aquí. Es una recopilación de historias inspiradas por distintas campañas. Lo más importante era que la portada reflejara los distintos personajes, así que el primer paso fue asegurarme de que mi diseño encajaba con lo que Paloma tenía en mente.
Luego probé distintas composiciones de portada y contra. Nos decidimos por la más dinámica, con los personajes a punto de entrar en combate.
Para hacer la línea dejé los rayos aparte, lo que me interesaba era asegurar que las siluetas de las tres se leían bien y funcionaban juntas. También revisé que hubiera sitio para el título y el resto de elementos:
Con la confirmación de que la línea encajaba, ¡pruebas de color! Paloma se decidió por el azul, al encajarle con las ropas de los personajes.
El color siempre es un paso delicado, y si tenemos rayos por todas partes también es un montón de sombras duras y luz brillante que tener en cuenta. Aquí podéis ver algunos de los pasos para intentar reflejar esa luz correctamente:
Y el resultado final es la imagen al principio de este post. Como bonus también diseñé una versión chibi de sus aventureras jugando a rol, para su cabecera de Twitter.
Quiero agradecerle a Paloma su paciencia email tras email, y dejarle un hueco para que os hable más de Retazos de un camino:
Todo empezó con un concurso en el que participé en Generación X Alcalá de Henares que consistía en ir a la tienda y escribir un relato improvisado de dos páginas máximo ambientado en la literatura de Lovecraft que contuviese cinco palabras que ellos te daban. Quedé entre los 10 finalistas. Eso me animó a seguir escribiendo, o más bien a retomarlo: me apunté a un curso de escritura al que me invitó mi amigo Tomás Sendarrubias (trilogía Las Crónicas del Dios Muerto) y seguí con los relatos y después revisé, actualicé y autopubliqué La Luz de Coral.
Mi amigo Tomás es uno de los máster habituales de las partidas de rol que juego y tiene un blog donde escribe. En ese blog, entre otras cosas, subía las crónicas de las sesiones que nos dirigía y a mí me encantaba ver a mis personajes en movimiento. Para dos partidas en concreto, creó un relato previo del personaje en solitario y también del grupo. Eso me inspiró para hacer yo lo mismo en otras dos partidas que empecé con otros másters. Y gustaron. Y yo lo disfruté. Así que pensé: voy a hacer esto con todos mis personajes de rol. Y de ahí fui viendo que cogía grosor suficiente para una novela. Pero no quería un compendio de relatos y ya, quería darle unidad. Así que, entre varios comentarios de amigos del rol, se me ocurrió la idea de hilarlo con las disertaciones de Sintaxis. Y esto es lo que ha quedado.
Estoy contenta con el resultado y espero que puedan disfrutarlo no solo personas que jueguen a rol o gente que lee habitualmente fantasía sino también el público en general. Quiero creer que el contenido tras la ambientación puede ser del disfrute de cualquier persona que ame leer. Además, al ser historias cortas, creo que pueden disfrutarlo también quienes no habitúan a leer mucho.
¡Espero que os resulte interesante, y que os haya gustado este viaje por el diseño de la cubierta!